Biblioteca sin libros.

Estados Unidos ha experimentado un gran cambio en la concepción del servicio de biblioteca. La localidad texana de San Antonio ha abierto Biblio Tech, la primera biblioteca pública sin libros impresos en un barrio pobre. El proyecto ha sido impulsado por del juez del condado para ahorrar el gasto de los libros debido a sus pocos recursos. La inspiración de esta idea está en la biografía de Steve Jobs. Logró el medio millón necesario para hacer digital la biblioteca de donaciones privadas.

BiblioTech dispone de un catálogo de 10.000 libros provenientes de 3M Cloud Library, accesibles con el número de carnet de la biblioteca a través de una app disponible en PC, Mac, iOS y Android, que impone un límite máximo de 14 días para leer el libro. Además de esta posibilidad, ofrecen 700 lectores electrónicos que los usuarios pueden llevarse a casa con el libro que quieren leer descargado en el aparato y otros 200 con libros para niños ya cargados en el dispositivo. El local recuerda a una tienda Apple por el material del que dispone: 48 ordenadores, 9 portátiles Mac, 40 iPad, cuatro mesas interactivas con pantallas táctiles y una Xbox. A continuación una imagen de su página web.

En el barrio de South Side donde se encuentra la biblioteca, solo el 25% de los residentes tienen acceso a Internet, de modo que además de ofrecer el préstamo de libros digitales proporciona la oportunidad a los vecinos de acceder a la red para hacer gestiones.

Proyectos similares ya se habían pensado en otros estados del país, pero las quejas de los usuarios hicieron no llevar a cabo el proyecto y volver a las estanterías de libros de papel.  Un buen dato es que el número de usuarios de e–book aumentó del 16 al 23% en Estados Unidos, mientras que la cifra de los amantes del papel cayó del 72 al 67%.

Este proyecto es muy ambicioso, sin embargo, no acabará con el lugar físico de intercambio de libros. Por el momento, solo es una alternativa más. No es el principio del cambio de servicio de todas las bibliotecas del mundo, ya que el libro físico sigue siendo muy importante.

¿Opinas que algo así sería posible en España? ¿Deberíamos ofrecer las dos opciones de bibliotecas?